HOW A REALIST HERO REBUILT THE KINGDOM (WN 135-137) VOL. 18

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Y seguimos con las traducciones, creo que voy a un buen ritmo pero todavía falta bastante así que ni modo a trabajar para ponerse al día.

Como siempre disfruten de su lectura.


Hoy les dejo a Bocchi para que no se olviden de ella 





HOW A REALISTIC HERO REBUILT THE KINGDOM (WN)


VOL.18


<< Capítulo de la canción de los héroes >> 




Episodio 46 "Hacia la batalla final"

 




Hablemos sobre los movimientos de cada país después del incidente.

En primer lugar, el que más destacó fue la antigua nación mercenaria de Zem, que era un estado vasallo del Imperio del Gran Tigre. Moumei, subordinado de Fuuga que había actuado como rey regente en esta zona, se lamentó dejando escapar un grito desgarrador al conocer sobre la rebelión de Krahe y la incertidumbre de la supervivencia de Fuuga. Después de enterarse, entrego el poder al anterior rey de la nación mercenaria Zem, Gimbal, que se había retirado para poder tener una vida solitaria, y él mismo regresó al Imperio del Gran Tigre con sus seguidores.

Moumei intentó atacar a Krahe, el traidor, pero sus fuerzas eran mucho menores en número que las fuerzas rebeldes que había reunido Krahe. A pesar de su valentía en la lucha, las tropas de Moumei fueron finalmente aniquiladas y terminó siendo mártires de la causa de Fuuga.

Por otro lado, Gimbal, al que se le confió el futuro de aquella, decidió hablar con los señores feudales del territorio y decidieron ceder el control del antiguo territorio de la nación mercenaria de Zem y su pueblo al líder de la República, Kuu Taise. Sabiendo que la República había gobernado con habilidad las dos ciudades que habían conquistado del antiguo territorio de la nación Zem. Los habitantes de Zem, que desde el principio valoraban la habilidad militar y buscaban un líder ambicioso, parecen haber sido atraídos por el carisma de Kuu Taise, la cual era un poco similar a la de Fuuga.

Kuu aceptó esta oferta y el territorio de la antigua nación mercenaria de Zem fue incorporada a la república, ampliando su territorio sin ningún derramamiento de sangre. El territorio de Zem no tenía tierras fértiles y estaba repleta de montañas, pero Kuu, que había aprendido cómo desarrollar la infraestructura del transporte en el Reino de Friedonia, sabia como gobernarla eficazmente.

Mientras la antigua nación de mercenarios de Zem había cambiado de gobernantes sin mayor problema, el Estado Ortodoxo de Lunaria, que también había pertenecía a la facción de Fuuga, estaba en un estado de gran confusión. Las fuerzas que habían apoyado a Fuuga como el rey santo habían ganado en las luchas de poder dentro de la iglesia, logrando ser los últimos sobrevivientes en medio de una tormenta de purificación. Sin embargo, al perder a Fuuga, el estandarte de su causa, no pudieron mantener su autoridad.

Aquellas personas que habían sido consideradas herejes y fueron reprimidas, volvieron a tomar fuerzas y atacaron al gobierno actual como si fuera el momento de venganza. Muchos obispos que apoyaban a Fuuga fueron sacrificados, y la Santa Anne también fue capturada y encarcelada en una torre. Se dice que la razón por la cual la mantuvieron con vida fue para condenarla posteriormente y ejecutarla de manera llamativa con el objetivo de impresionar a los fieles y lograr un cambio de gobierno efectivo.

Sin embargo, la caída de la facción de Fuuga, que había mantenido la autoridad hasta su final, significó que ya no existía ninguna fuerza capaz de calmar esta confusión dentro del Estado Ortodoxo de Lunaria. La matanza llamó a más matanzas, y en medio de esta confusión en la que no se sabía quién era legítimo y quién era un hereje, se derramó mucha sangre sin distinción entre obispos y fieles. La gente que estaba harta de esta lucha sangrienta por el poder anhelaba a alguien que pudiera calmar esta confusión.

La persona en la que depositaron su esperanza fue el obispo Soji Lester y la Santa Mary, líderes de la "Iglesia Ortodoxa Lunaria del Reino" que mantenían la autoridad de la Iglesia de Lunaria en el Reino de Friedonia. A pesar de que la Iglesia Real fue considerada como una herejía en su país de origen, era una secta legítima de la Fe de Lunaria además que contaba con el respaldo del poder de Souma, que se había enfrentado a Fuuga. Gracia a esto, se esperaba que la actitud tolerante de la Iglesia Ortodoxa Lunaria del Reino hacia otras religiones y sectas pudiera calmar y reconciliar esta confusión.

Las voces de los ciudadanos del Estado Ortodoxo de Lunaria conmovieron a Soji, quien por general era perezoso y poco entusiasta. Sin embargo, después de que Mary lo persuadiera insistentemente preocupada por la situación de Anne, quien estaba encarcelada, finalmente se decidió a actuar. Soji solicitó la cooperación de Souma, quien la aprobó. Con la ayuda del ejército restaurado de la familia Carmine, Soji y Mary regresaron a su país. Y siendo respaldados por un poder militar que los distinguía de los demás, emitieron una declaración:

"Si tú dejas tu espada, yo dejaré la mía"

Con esto, la Iglesia Ortodoxa del Reino dejó en claro que no llevaría a cabo ningún tipo de inquisición o la represión de ninguna secta. Esto disipó la desconfianza de aquellos que estaban furiosos pensando en "es matar o morir ", tranquilizando la situación.

Aunque Anne, que había estado encerrada en la torre, mostraba signos de desnutrición y deshidratación, logró sobrevivir. Fue liberada y Mary se encargaría de ella. Sin embargo, debido a la muerte de Fuuga, quien había sido su apoyo emocional hasta ese momento, Anne tuvo que enfrentar de frente la masacre y la muerte que había estado ignorando y enterrando en su corazón, sufriendo un trauma en su psique debido a esto, al punto que se dice que cuando la sacaron de su vida de prisionera, estaba en un estado tan deplorable que apenas se le podía denominar como humano.

"¡Uaaah...aaahhh!"

"¡Anne! ¡Está bien, todo está bien!"

Mary cuidaba con devoción de Anne, quien gritaba como si fuera atacada por una pesadilla. No se sabe si la herida en su corazón se curará completamente, pero la Iglesia Ortodoxa de Lunaria cambiará gradualmente bajo el liderazgo de Soji.

Mientras tanto, en el centro del caos, estaba el Imperio del Gran Tigre dividido en tres facciones.

En primer lugar, estaba el "ejército de Krahe" liderado por el propio Krahe, quien había derrotado a Fuuga. Y que defendía la continuación de la línea de pensamiento expansionista de la política del imperio, como lo había hecho Fuuga, con lo cual había atraído a aquellos que todavía creían que el Imperio del Gran Tigre seguía siendo la nación más grande y más poderosa en el continente de Landia. Y a ellos se unieron los rebeldes que odiaban a Fuuga y los mercenarios que no podían aceptar la llegada de una era de paz, lo que les convirtió en una gran fuerza.

Por otro lado, estaba el "Ejército de Resistencia", que se oponían a Krahe y con el objetivo de vengar a Fuuga. Lombard Rem y su esposa Yomi, que habían regresado al Imperio del Gran Tigre a través de un intercambio de prisioneros, se refugiaron en un castillo en el antiguo territorio de la Federación Republicana de Fract. También, Shukin y Lumiere, que habían sido enviados para sofocar la rebelión, se reunieron en la parte occidental del Imperio del Gran Tigre y estaban reuniendo tropas para derrotar a Krahe.

Mientras Lombard y los demás se dedicaban a resistir para ganar tiempo, parecía que el plan de Shukin y los demás era prepararse para atacar a los partidarios de Krahe y derrotarlos. Sin embargo, debido a varios intereses, el ejército de resistencia estaba en clara desventaja numérica frente al ejército de Krahe, que había podido reunir tropas de varias partes. A pesar de esto, los miembros de la resistencia estaban motivados por su lealtad hacia Fuuga y su ira hacia Krahe y los que se habían unido a él.

Y luego estaba el tercer grupo: los "Oportunistas", que son la abrumadoramente mayoría dentro del Imperio. En lugar de ser neutrales, eran personas que decían que no podían movilizarse y representaban la mayor parte del Imperio. Como no sabían quién lideraría el Imperio ahora que Fuuga había desaparecido, simplemente observaban, por el momento, el desarrollo de la guerra entre el ejército de Krahe y el de la Resistencia. Los seguidores del carismático Fuuga habían seguido ganando poder al seguirlo, por lo que habían renunciando a elegir su futuro durante ese tiempo.

La gran cantidad de "oportunistas" dificultaba que la resistencia obtuviera soldados y suministros, lo que impulsaba el ímpetu del ejército de Krahe, que había demostrado su determinación de actuar según su propia voluntad. Shukin parecía estar pidiendo apoyo al Reino de los Espíritus de Garland a través de la princesa Elul, mientras que Lumiere, aparentemente ignorando la vergüenza, disculpándose con Jeanne, la reina del Reino de Euforia, por todo lo que había ocurrido en el pasado mientras le solicitaba su apoyo.

――― Y en este momento. Cuando la confusión en el Imperio del Gran Tigre se profundizo.

Recibimos la noticia de que Kasen, un general del Imperio del Gran Tigre, y Suiga, el hijo huérfano de Fuuga, llegaron hasta el castillo de Parnam, junto a Liscia, Yuriga e Ichika los recibimos en la sala de audiencias real. Mientras me sentaba en el trono, eché un vistazo a Yuriga que estaba a mi lado. Aunque no la vi aquel día, cuando María le dijo que Fuuga había desaparecido y su paradero era desconocido, Yuriga no lloró ni se desmayó, simplemente se negaba a creerlo.

"Mi hermano no moriría por una rebelión de sus vasallos. Debe ser una información falsa ... probablemente solo fingió su muerte para deshacerse de los problemas y dejar que alguien más tome el trono... seguro que es eso"

Eso fue lo que dijo Yuriga, frente a la preocupación de Liscia y los demás, se mantuvo firme. Incluso ahora, aunque parecía nerviosa, no mostraba enojo ni tristeza en su rostro.

"Gracias por venir, Señor Kasen"

"Sí, gracias por recibirnos a mí y al joven amo en su hogar"

Cuando lo saludé, Kasen, arrodillado, inclinó profundamente su cabeza. Es un joven guerrero de la raza celestial como Yuriga. Lo he visto varias veces y, aunque es joven, parece ser uno de los mejores guerreros del Imperio del Gran Tigre. Y en sus brazos llevaba a un bebé.

"¿Ese niño es el hijo de Fuuga-dono y Mutsumi-dono?"

"Sí, es Suiga-sama. Vine aquí para confiarle al joven amo a Yuriga-sama"

"...Souma-san"

Yuriga me habló con una mirada que parecía estar pidiendo ayuda. Al ver sus ojos, entendí lo que estaba pasando en su corazón y asentí. Entonces, Yuriga corrió hacia Kasen. Se arrodilló frente a él y le preguntó mientras mantenía contacto visual.

"...Kasen-dono. ¿Realmente murió mi hermano mayor?"

"...Lo siento mucho, Yuriga-sama. Me confiaron al joven amo y escapé por otra dirección antes que Fuuga-sama, así que no pude acompañarlo hasta el final. Vi a Gaten-dono sacrificarse para protegerme y dejarme escapar... "

Kasen se lamentó de una manera que mostraba arrepentimiento. Yuriga puso su mano sobre su hombro y negó con la cabeza.

"Te esforzaste mucho. Por eso pudiste salvar la vida de este niño. Si mi hermano mayor estuviera aquí... Estoy segura de que te elogiaría por haber cumplido tu deber tan bien"

"Yuriga-sama..."

"¿Puedo sostener a este niño en mis brazos?"

"Sí, por supuesto"

Yuriga tomó a Suiga de los brazos de Kasen y lo abrazó entre los suyos. Como una de las reinas, a veces cuidaba a Stella, incluso a pesar de que todavía era un niño menor de un año, ella podía cuidarlo con seguridad. Al ver a Yuriga sosteniendo al hijo de Fuuga y Mutsumi, todos los presentes sintieron una emoción de melancolía abrumadora.

Entonces Kasen sacó un papel de su bolsillo y se lo entregó a Yuriga.

"Esto es para el rey Souma. Un mensaje de Fuuga-sama"

"¿De mi hermano?"

Yuriga recibió el papel y regresó con Suiga en sus brazos. Tomé el papel que Yuriga me entregó. Había un mensaje escrito a mano en él que decía:

"Para Souma y Yuriga. Confío en ustedes el país y a Suiga. Si cuidan bien de Suiga, nunca volveré a aparecer en este mundo. Vivo o muerto"

"Es muy típico de Fuuga..."

Es como si hubiera mantenido su forma de vida egoísta hasta el final, ya sea para bien o para mal. El mensaje no tenía un sentido de desesperación o algo por el estilo, por lo que me resultó difícil sentir ninguna emoción en particular. Mientras fruncía el ceño, Liscia, que estaba parada a mi lado, le preguntó a Kasen,

"¿Qué piensas hacer a partir de ahora, Kasen-dono?"

Entonces la mirada de Kasen se volvió fría.

"Voy a matar al traidor Krahen. Seguro que otros, como Shukin-dono, se levantarán para derrotarlo. Planeo unirme a ellos"

"Es tal como dices, hemos recibido informes de que Shukin-dono y Lumiere-dono están reuniéndose en el oeste del Imperio"

Dijo Liscia mientras me miraba. Y yo asentí.

"Kasen-dono. Desde este castillo de Parnam, hay un viaje regular de la Nación de Caballeros Dragón de Nothung que va hasta la capital del Reino de Euphoria, Valois. También hay una góndola de transporte de personal, así que sería más rápido y seguro tomar esa ruta y luego ir hacia el norte desde Valois. Te concedo el permiso para que lo utilices"

"¡En serio?! ¡Muchas gracias!"

Kasen expresó su gratitud varias veces, y tras entregarnos a Suiga salió de la sala de audiencias. Mientras los demás nos quedamos mirando a Suiga en brazos de Yuriga.

"Bueno, ¿qué hacemos con este niño...?"

"Es mi hijo"

Yuriga dijo eso antes de que cualquiera pudiera decir lo que fuera, mientras se giraba protegiendo a Suiga.

"Lo criaré como a mi hijo. Así que, por favor, déjenme salvar su vida"

"Tranquila, Yuriga. No tenemos intención de hacerle daño al niño"

Liscia se acercó y abrazó suavemente el hombro de Yuriga. Entonces, Ichiha, que había estado en silencio hasta entonces, suspiró suavemente mientras se tocaba la frente con la mano.

"Como el primer ministro, debería explicar el peligro de dejar a este niño con vida, pero... no puedo hacerlo. Después de todo, este niño es el hijo de mi hermana Mutsumi"

Es verdad. Suiga era sobrino tanto de Yuriga como de Ichiha.

"Hakuya-sensei habría dicho que no deberíamos dejarlo con vida"

"Si el probablemente lo hubiera dicho. Pero estoy seguro que solo serían palabras expresando sus críticas porque sabría que yo y Liscia estamos protegiendo a Yuriga para evitar que se entristezca"

"... Sí, es verdad"

Mientras sonreíamos irónicamente, Liscia de dio un golpecito en el hombro a Yuriga.

"No tienes que cargar con esto sola. Tienes una gran familia y gente con experiencia en crianza de hijos que te apoyan. Así que no seas tímida y pide ayuda a las otras reinas con más experiencia, ¿de acuerdo?"

"Liscia-sama ... uh, sí!"

Yuriga respondió con entusiasmo mientras se enjugaba las lágrimas. Liscia asintió, satisfecha con la respuesta de Yuriga, y luego se volvió hacia mí.

"Entonces, Souma, ¿qué haremos nosotros? ¿No interferiremos en los asuntos internos del Imperio?"

Cuando me preguntó eso, sacudí la cabeza y dije: "... no".

"Hablé con Hakuya y le comenté que, si el norte seguía sumido en el caos, podríamos volver a la época de caos cuando el Territorio del Reino Demonio estaba en su apogeo. Si continúa la guerra civil en el Imperio, podrían surgir nuevos refugiados y eso también tendría un impacto en nuestro país. Es necesario evitar que el norte caiga en el caos y estabilizar la situación rápidamente"

"¿Y eso que significa...?"

"Destruir por completo el ejército de Krahe. Con todo lo que tenemos"

El Imperio del Gran Tigre, que perdió el carisma de su líder, se dividiría pronto. Pero no permitiré una guerra de sucesión como la de los Diádocos. Aunque es involucrarnos en los asuntos de otro país, la existencia de Suiga y el mensaje de Fuuga de confiarme su país serán nuestra justificación. Nos uniremos a la resistencia de Shukin y atacaremos a Krahen con todo nuestro poder.

No permitiré que volvamos a los tiempos de caos. ¡Prepárate, Krahe!



Episodio 47 "Batalla decisiva final"



 

--- Ha pasado alrededor de un mes desde el Incidente del "Desastre del Gran Castillo del Tigre".

El ejército de 50,000 soldados de Krahe, en el cual estaba conformado por aquellos que estaban insatisfechos con las políticas de Fuuga, aquellos que no podían abandonar su orgullo de ser la nación más grande y fuerte del continente, y aquellos con ambiciones, estaban atacando el castillo donde Lombard y Yomi se estaban refugiado. Aunque solo había entre 2,000 a 3,000 defensores en el castillo, Lombard y Yomi seguían luchando valientemente y resistiendo los feroces ataques del ejército de Krahe que iban en aumento.

Sin embargo, debido a la gran superioridad numérica del enemigo, Lombard y estaban siendo gradualmente empujados hacia atrás, y el castillo parecía estar a punto de caer en cualquier momento. Pero en ese momento, el Ejército de la Resistencia, compuesto por unos 20,000 soldados que habían recibido el apoyo del Reino de Euphoria, llegó para ayudar a Lombard y Yomi. Aunque el ejército de Krahe todavía tenía una gran ventaja en términos de fuerza militar, el general del lado de la resistencia, Shukin, era un general excepcionalmente habilidoso, por lo que el ejército de Krahe decidió detener su ataque al castillo y en cambio, enfrentarse al ejército de Shukin.

Pero debido a su escasez de soldados, el Ejército de la Resistencia no podía simplemente atacar al ejército de la Krahe sin una estrategia adecuada. Si perdían a Lombard y los demás, la fuerza de la resistencia se debilitaría y existía el temor de que se produjera una mayor deserción. Aunque querían liberar rápidamente el castillo, no podían atacar descuidadamente por temor a ser vencidos, por lo que no pudieron avanzar al campo de batalla donde tendría lugar el enfrentamiento decisivo.

Al mismo tiempo, Shukin y los demás, sabían que "el tiempo estaba de su lado", y esperaban pacientemente una oportunidad mientras deseaban que los Lombard y compañía, con los que no podían comunicarse, confiando que no hicieron ningún movimiento precipitado. Por otro lado, las fuerzas de Krahe, se sentían frustrados por la actitud cautelosa de la resistencia, que no parecía tener intención de luchar, por lo que simplemente los observaban desde lejos.

Cuando llegaron los refuerzos de la resistencia, ya era casi de noche. Debido a ello, el ejército de Krahe pasó toda la noche en alerta, temiendo un ataque nocturno por parte de Shukin o un posible intento de escape de Lombard y los suyos al amparo de la oscuridad. Entonces, la mañana siguiente llegó, y un Krahe totalmente exasperado, intentó reiniciar el asedio al castillo para tratar de atraer a Shukin, pero en ese momento.

"¡Informe! El ejército del Reino de Friedonia ha invadido el Gran Imperio del Tigre con una fuerza de casi 100,000 soldados y se dirige hacia este campo de batalla desde el oeste"

Un mensajero entró corriendo en la sede del ejército de Krahe y gritó su informe. Los comandantes del ejército de Krahe se agitaron al escuchar la noticia.

"¿El Reino de Friedonia? ¿El Rey Souma está atacándonos?"

"¿Por qué aquella lenta tortuga que nunca había intentado interferir en los asuntos de otros países, se mueve tan rápidamente ahora?"

"¿Es posible que, sin Fuuga Khan, hayan decidido conquistar el Imperio del Gran Tigre?"

Mientras varias especulaciones se intercambiaban, una persona relativamente tranquila le preguntó al mensajero:

"En primer lugar, ¿cómo es posible que un ejército de solo 100,000 soldados del Reino haya podido avanzar todo este camino en el Imperio del Gran Tigre, país que posee una fuerza total de más de 400,000 soldados? Aunque haya muchos que estén tratando de no involucrarse, ¿Aun así, no deberían estar encontrando resistencia por parte de los señores feudales locales?"

Ciertamente, hay una gran distancia entre este castillo de la antigua Federación de Fract y el Reino de Friedonia. A diferencia del Ejército de Krahe y el de la Resistencia, el ejército del Reino es un ejército extranjero para los ciudadanos del Imperio del Gran Tigre. Habría pocos señores que les permitirían pasar y el asegurar su línea de suministro también sería difícil. Incluso para el ejército del Reino, que ha establecido tecnologías de transporte masivo, como el tren Rinoceronte, sería difícil.

Sin embargo, el mensajero negó con la cabeza.

"El ejército del Reino tiene a Yuriga Khan a su cabeza, y ella les dijo a los señores locales que 'el Reino de Friedonia, estaba protegiendo a Suiga, el hijo del Fuuga Khan, yo misma, Yuriga, me enfrentare contra Krahe en lugar de Suiga, esto es solo una venganza en contra del traidor Krahe, mi esposo, Souma, no tiene ambiciones territoriales'. Parece que ella les pidió a los señores locales que no obstaculizaran el paso del ejército del Reino"

Yuriga, la hermana de Fuuga, está tratando de vengar a su hermano y matar a Krahe. Por eso, ella ha traído consigo al ejército del Reino de Friedonia, con quien estaba casada. Si avanza con claridad, los señores feudales del lado de la resistencia la recibirán con los brazos abiertos para no obstaculizarla, y los señores feudales del lado del ejército de Krahe también le permitirán el paso para evitar un enfrentamiento con 100,000 soldados. Incluso los oportunistas, que son abrumadoramente mayores, también la dejarán pasar para no ser arrastrados a la batalla.

O tal vez, habiendo juzgado que la participación del Reino de Friedonia daría a la resistencia una ventaja abrumadora, podrían haber considerado unirse al lado de la resistencia. La cantidad de tropas que trajeron, 100,000 soldados, también era excelente. Suficientemente grande para derrotar al ejército de Krahe, pero una cifra lo suficientemente pequeño para no preocupar a las personas de que podría intentar cortar al Imperio del Gran Tigre, dando la impresión de no tener ambiciones territoriales.

"¡Maldición! Si hubiéramos logrado tomar el castillo antes de la llegada de los refuerzos..."

Alguien dijo eso sacándolo de su pecho en frustración. Pero si hablamos de "lo que podría haber sido", para que el ejército de Krahe hubiera tenido la oportunidad de ganar, primero tendrían que haber tomado el castillo donde Lombard y sus hombres estaban atrincherados, incluso si tuvieran que tomarlo por la fuerza, y luego derrotar a los refuerzos de Shukin que habían llegado. Si ya no hubiera resistencia, los indecisos se habrían inclinado hacia el ejército de Krahe, y el ejército del Reino no habría podido avanzar con tanto éxito con solo alrededor de cien mil soldados.

Sin embargo, tal historia no era más que un castillo en el aire. Dado que...

"... Supongo que Shukin-dono sabía que el ejército del Reino iba a llegar, ¿verdad?"

Todos los presentes miraron hacia Krahe cuando él murmuro eso mientras escuchaban en silencio.

"Aunque deberían haber intentado salvar a Lombard-dono, Shukin-dono y sus fuerzas no mostraron ningún movimiento agresivo. Pensé que era porque eran un pequeño número de soldados, pero más bien estaban esperando la llegada del ejército del Reino como refuerzo. Probablemente hubo platicas previas"

"Entonces, ¿qué deberíamos hacer?"

Uno de los generales, incapaz de soportar la tensión, le preguntó a Krahe, quien no parecía estar preocupado. Entonces Krahe respondió con una sonrisa leve.

"Sería mejor levantar el asedio del castillo y reunir nuestras tropas para enfrentarlos juntos, ¿no creen?"

"¡¿Q-Qué?! ¡Si el ejército del Reino y el ejército de la Resistencia se unen, tendrán casi tres veces el número de nuestras fuerzas!"

"¿Y qué hay con eso?"

Krahe respondió con una expresión serena a uno de los generales que habló con voz alterada.

Uno de los generales gritó en pánico, pero Krahe mantuvo la calma mientras hablaba:

"Derrotamos a Fuuga Khan, quien fue temido como el más fuerte e invencible de todos los tiempos. ¿Hay algún enemigo más temible y poderoso que Fuuga-sama? ¿Souma? ¿Shukin-dono? No hay forma de que puedan igualar a Fuuga-sama. Incluso si vienen con grandes números, si Souma, quien no tiene la ambición de Fuuga-sama, ataca, todo lo que tenemos que hacer es repelerlo. Además, no sabemos hasta qué punto la resistencia y el ejército del Reino pueden mantenerse cohesionados"

"¡Ooooooooohhhhh!"

Las palabras de Krahe impresionaron a todos los presentes, quienes se jactaban de haber derrotado a Fuuga. La conciencia de culpa por haber asesinado a su líder los había dejado sin otra salida, pero el sentimiento de exaltación de haber matado a un héroe satisfizo su autoestima. Por lo que, las palabras de Krahe de que eran los más fuertes resonaron en sus corazones fuertemente.

Por otro lado, los verdaderos pensamientos de Krahe eran otros. Sus palabras anteriores fueron un medio para mover a todos, pero en realidad no había pensado en las posibilidades de ganar o perder.

("La actriz vendrá a mí. Esto es realmente el papel que el cielo me ha dado")

En medio del ejército que se movía para enfrentarse a Souma y compañía, Krahe se reía impasiblemente.

(María-sama, quien había perdido su brillo como "santa" del Imperio, recuperó su esplendor al convertirse en mi enemiga. Ahora se dice que está ganando el respeto de la gente en el Reino de Friedonia. Al retirar a Fuuga-sama del tablero, quien se había estancado como héroe y había perdido su ambición, el Imperio del Gran Tigre volvió a moverse. Souma, Shukin-dono y otros héroes se han reunido aquí para derrotarme. Parece que el calor de esta época seguirá creciendo mientras exista yo como el mal).

Para Krahe, el resultado de esta batalla no importaba en lo absoluto. Lo que él consideraba como su destino era mantener una época de guerra y caos llena de drama. María, a quien admiraba, renunció a su posición como emperatriz, y Fuuga se estancó después de su batalla con la Alianza Marina. Krahe sintió esto como una traición, y al igual que a un personaje de una epopeya heroica, esa fue la causa de su muerte.

Parecía que lo habían incitado a tomar esta postura, pero en realidad, no era más que la germinación de una idea peligrosa con la que Krahe había nacido. Debido a su propia naturaleza, no podría haber disfrutado de los tiempos pacíficos.

("¡Reúnanse Héroes y Reyes! ¡Denle color a esta época para derrotarme!")

Krahe estaba disfrutando de su papel como Rey Demonio.

◇ ◇ ◇

"Julius, tengo algo que pedirte"

"¿Qué ocurre?"

Antes de la batalla, le pedí un favor a Julius, mi estratega militar. Después de escuchar lo que le tenía que decir, Julius pareció sorprendido por un momento y luego me miró fijamente a la cara.

"¿...Estás hablando en serio?"

"Sí. De cualquier manera, no podemos seguir así"

"Entiendo eso, pero..."

Julius frunció el ceño y suspiro.

"Probablemente será una tarea difícil para ti, pero no hay nadie más a quien pueda confiarla"

"…bueno, no es lo que hubiera esperado, pero…"

"Por supuesto, cooperaremos al máximo. Así que...por favor, cuento contigo"

"…entendido"

Julius asintió y lideró a sus hombres lejos del ejército. Eso sucedió ayer. Ahora, desde el campamento principal sobre una pequeña colina, nuestro ejército ahora reunido con la resistencia de Shukin luchaba intensamente contra el ejército de Krahe. Junto a mí, mirando el campo de batalla de pie, también estaba Yuriga observando todo fijamente.

En su rostro no se notaba enojo ni tristeza, solamente tenía una expresión seria. Me preocupé aún más debido a eso y le pregunté a Yuriga:

"¿Estás bien, Yuriga?"

"¿A qué te refieres?"

Al escuchar su respuesta con voz inexpresiva, no sabía cómo hablarle. Si está actuando valientemente cuando realmente no lo es, es mejor dejarla sola. Pero si se siente abrumada, también quiero apoyarla. ¿Qué es lo correcto para ella en este caso: ofrecer mi ayuda o ignorarla? No lo sabía, así que lo que pensé lo dije en voz alta:

"Bueno ... tal vez quieras vengarte tú misma ..."

Al escuchar eso, la expresión de Yuriga se nubló. Luego .......

"Sinceramente, no me importa"

Dijo con voz baja.

"Por supuesto, no puedo perdonar a Krahe y el castigo por su traición debe ser la muerte... pero, si eso es lo que se considera una compensación, entonces es ridículo. Pero no quiero vengarlo con mis propias manos ni nada por el estilo. Para mí... proteger a Suiga, que me fue confiado por mi hermano y hermana mayor, es más importante que arriesgar mi vida por alguien como él"

"Ya veo"

Es posible que quiera vengarse de Krahe, pero su principal preocupación es mantener a Suiga alejado del peligro. Si deja a Krahe con vida, nunca sabría cuándo Suiga podría estar en peligro. Con esa ansiedad en mente, Yuriga se acercó a mi lado y se acurruco conmigo. Le di un suave abrazo en el hombro.

"No te preocupes. Traje a los mejores guerreros conmigo. Sin duda haremos que Krahe deje de respirar "

Les pedí a Liscia, Juna y Excel que se quedaran en casa, pero traje a los mejores guerreros del Reino, Aisha, Naden, Ludwin, Hall, Ruby, Kaede y Mio. Después de todo, son vasallos fiables que repelieron la embestida del Ejército Imperial del Gran Tigre liderado por Fuuga, así que no había forma de que Krahe les frenara. Yuriga asintió a mis palabras.



Episodio 48 "Amanecer"

 



El ejército aliado del Reino de Friedonia, liderado por Souma, y el ejército de Resistencia liderada por Shukin, superaban ampliamente al ejército de Krahe en términos de número y calidad de soldados, armamento y suministros. El hecho de que incluso Fuuga Khan, con todo el poder del Imperio del Gran Tigre, no lograra obtener la victoria sobre el Reino de Friedonia demostraba la tremenda fuerza y ​​recursos que poseía el reino, era poco probable que el ejército del reino pudiera ser derrotado, sobre todo si estaba dirigido por solo un general como Krahe.

Sin embargo, el ejército de Krahe, al haber matado a su señor Fuuga, se consideraba como un grupo de traidores desde la perspectiva del Imperio del Gran Tigre. Por lo que, si perdían esta batalla, no tendrían futuro alguno. Como mínimo, todos los generales que dirigían el ejército serían acusados de matar a su señor y serían ejecutados por Shukin y los otros súbditos leales que ardían en deseos de vengar la muerte de Fuga. En otras palabras, ya no les queda nada que perder.

Por esta razón, el ejército de Krahe mostraba tanta tenacidad a pesar de estar en tanta desventaja. El ejército del Reino, confiado en su victoria, por lo que tendían a no arriesgar sus vidas, mientras que el ejército de Krahe, sin nada que perder, luchaba desesperadamente hasta la muerte, creando una brecha en el espíritu de lucha bastante marcada. Si el ejército de Krahe hubiera tenido un héroe como Fuuga, podría haber existido la posibilidad de sorprender al enemigo y lograr un giro inesperado durante la batalla hacia la victoria. Sin embargo, la era ya no requería de héroes.

"¡Doryaaaaaa!" (¡Zubannn!)

"¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Aaaaaaaahhhhhhhh?!?!!!!!!"

Entre el ejército de Krahe, se encontraba un musculoso maniático amante de la batalla, Nata, quien estaba derribando a los soldados del Reino de Friedonia con su hacha gigante favorita. No importaba si llevaban escudos o armaduras, los soldados del Reino de Friedonia eran arrojados por los aires con un solo golpe del hacha de Nata.

"¡Gahahaha! ¡Así es como debe ser una batalla!"

Nata río alegremente mientras sostenía su gran hacha. Deseaba seguir luchando contra oponentes fuertes y demostrar su valentía en combate contra otros guerreros. Estaba cansado del ambiente de este mundo que gradualmente se estaba alejando de las batallas entre las facciones humanas. Por eso se unió al bando de Krahe, que buscaba derrocar a Fuuga. Lo hizo para devolver a este mundo a una era de caos en la que pudiera seguir luchando. En ese aspecto, esta situación le proporcionaba una gran satisfacción.

No le importaba estar en desventaja ni ganar o perder. Para Nata, lo único que importaba era tener enemigos frente a él a quienes pudiera masacrar. Esa era su razón de ser.

"¡Vamos! ¡Derramen más sangre, diviértanme más!"

En ese momento, ante el imponente espíritu de Nata que infundía temor, la gran hacha de Nata se acercaba lentamente a los soldados que habían perdido la compostura... Pero en ese instante, el entorno se oscureció y Nata detuvo su movimiento. Al mirar hacia arriba, vio un objeto negro gigante pasar por encima de su cabeza. Era Naden, la Ryuu negra, una reina de Souma. El paso de Naden había bloqueó la luz del sol. Y entonces...

"¡¿eh?!"

―――¡Zudon!

Nata se apartó rápidamente hacia atrás. Y justo en el lugar donde había estado Nata segundos antes, una guerrera elfa oscura cayó abruptamente y golpeó el suelo con su gran espada. El suelo que había sido golpeado presentaba profundas grietas y hendiduras en su entorno. Y ahí parada se encontraba, con su espada en posición, Aisha, la segunda reina principal de Souma. Quien había saltado desde Naden. En ese momento Aisha fulminó a Nata con la mirada.

"Así que tú eres Nata. Veo que sigues siendo una bestia sedienta de sangre"

"Una elfa oscura... Te conozco, eres una de las esposas de ese débil rey, ¿no es cierto?"

Nata levanto su gran hacha para enfrentarse a Aisha.

"Un tipo que se refugia en el campamento principal y es protegido por su esposa, no es rival para un hombre de verdad"

"No hables tonterías. Un bárbaro como tú no podría comprender la verdadera fortaleza y bondad de nuestro majestuoso rey, quien carga con el peso de nuestro país. ¿Como un salvaje como tú pudo crecer entre hermanos y hermanas tan inteligentes?"

"¡Cállate! ¡Voy a cortarte la cabeza y arrojarla ante Souma!"

"Incluso siendo el hermano de Ichika-dono, no tendré piedad. ¡Vamos!"

La gran hacha de Nata chocó contra la gran espada de Aisha.

―――¡Gan!―――¡Gan!

Como era de esperar de la fuerza bruta que Nata poseía, cada vez que su hacha chocaba contra la espada de Aisha, se generaban estruendos y ondas de impacto que se dispersaban por todo el entorno. Los soldados de ambos ejércitos presentes en la zona se quedaron pasmados ante tal escena y deteniendo sus peleas. En medio de ese choque, Nata mostraba una sonrisa de felicidad.

"¡Vamos, sigue así! ¡Diviérteme más!"

"......"

Por otro lado, la expresión de Aisha durante el enfrentamiento era fría. Aunque había estado luchando contra Nata por un tiempo, finalmente suspiró.

"...Es inútil. No eres lo suficientemente bueno"

"¿Qué dijiste?"

"No te acercas en nada a la fuerza de Fuuga-dono y mucho menos a la de cualquiera con quien haya peleado hasta ahora"

Aisha recordaba a los valientes guerreros con los que había cruzado espadas. La abrumadora fuerza de Fuuga Khan, que la superó en poder y habilidad, y que le hizo pensar que nunca podría vencerlo. La determinación de Castor, a quien ella y Liscia derrotaron juntas, cargando con la amistad de Georg y su convicción como guerreras. La recta habilidad marcial de Mio, quien participó en el torneo de artes marciales para descubrir la verdad sobre su padre, Georg.

Todos esos recuerdos estaban firmemente grabados en la memoria de Aisha. Sin embargo, no podía percibir nada similar en las habilidades marciales de Nata, quien estaba frente a ella en este momento.

"No tienes nada. Solo estás usando la violencia de la misma manera que un bebé arroja lo que tiene en sus manos. Como no tienes nada, no resuenas en absoluto con aquellos que luchas"

"¡¿Qué estás diciendo?!"

"Estoy diciendo que olvidaré esta batalla contigo enseguida"

--- Gusaa

La gran espada de Aisha atravesó su pecho. Aisha retiró la espada de forma suave y limpió la sangre que la ensuciaba. Nata, que aún se mantenía en pie con dificultad, intentó extender su mano hacia Aisha, pero en ese momento, Aisha ya le había dado la espalda y ya se alejaba de él. Casi como si estuviera diciendo que su vida no le importaba en lo absoluto.

Tratado como un débil, Nata quedó perplejo y murió en ese estado. Al mismo tiempo que Nata caía, el ejército de Krahe, que había estado resistiendo, comenzó a ceder gradualmente bajo la acumulación de fatiga. A diferencia del ejército del reino, que podía descansar y recuperarse gracias a su abundante personal y suministros, el ejército de Krahe no tenía tiempo para descansar, ya que estaban luchando sin parar.

En el cielo, las orgullosas tropas grifo también estaban siendo empujadas hacia atrás por el dúo de jinetes dragón, Hall y Ruby, y por las tropas de wyverns voladores lideradas por Castor y Carla. Mientras en tierra, bajo el mando de Ludwin y Kaede, el ejército de Krahe estaba siendo rodeado y aplastado.

◇ ◇ ◇

Cuando el resultado de la batalla se hizo evidente para todos, Shukin y Lumiere vinieron a nuestra base donde yo y Yuriga nos encontrábamos.

"¡Lamento mucho esto, Yuriga-sama!"

Shukin, al entrar en la base, se arrodilló en el acto y presionó su cabeza y ambos puños contra el suelo al ver el rostro de Yuriga.

"No pude proteger a mi señor, mi amigo, y a su hermano mayor, Fuuga-sama. Tampoco fui capaz de vengarlo con mis propias manos. Me avergüenzo de mi propia existencia. No tengo cara para mostrarme ante usted"

"Shukin-dono..."

Yuriga se arrodilló frente a Shukin y puso su mano en su hombro con un suave golpecito.

"Me alegra que estén vivos. No sé si mi hermano está vivo o muerto, pero gracias a Kasen-dono, Suiga sigue con vida. Aún corre la sangre de mi hermano y mi cuñada en él. Si consideramos lo que el joven Suiga llevará sobre sus hombros, sería un problema si no tuviera vasallos leales a su lado"

"Yuriga-sama... Lo lamento muchísimo..."

Shukin, con lágrimas en los ojos, era consolado por Yuriga. Mientras yo los observaba, Lumiere se arrodilló frente a mí y bajó la cabeza.

"Souma-dono, le agradezco sinceramente su apoyo en esta ocasión"

"...El caos del norte también nos afecta. Lo mejor es resolverlo lo más pronto posible"

Cuando le hice levantar la cabeza, Lumiere y yo cruzamos nuestras miradas.

"Lumiere, respecto al futuro..."

"Sí... Dejo todo en manos de Souma-dono. Yo quien desperté la locura que yace dentro de Krahe y encendió la mecha de este conflicto. No tengo derecho alguno a guiar a la próxima generación"

"Ya veo..."

Respondiendo con pocas palabras a la cara de Lumiere que parecía estar aplastada por su arrepentimiento, le dije. Les había informado previamente, antes de la guerra, a Shukin y Lumiere sobre el castigo futuro del Imperio del Gran Tigre. Puede que sea una noticia difícil para ellos, pero en este punto es imposible gobernar el vasto Imperio del Gran Tigre bajo una sola voluntad. Mucho menos la de un niño pequeño como Suiga quien no podría asumir esa gran responsabilidad.

Miré hacia el campo de batalla donde la retirada del ejército de Krahe había comenzado.

"Pero eso sería... la última etapa"

◇ ◇ ◇

El ejército de Krahe se había derrumbado. El comandante en jefe, Krahe Laval, se retiró del campo de batalla con solo unos pocos seguidores, mientras que los soldados restantes se encontraban rodeados por el ejército del reino, enfrentándose a la elección de ser asesinados o convertirse en prisioneros. La batalla llegó a su final al atardecer. Y cuando la noche cayó, Krahe, que logró escapar, cabalgaba por un estrecho camino montañoso.

("¡Así es! ¡Esto está bien! ¡La era todavía puede arder aún más!")

A pesar de estar huyendo, la cara de Krahe parecía estar ligeramente complacida. Tomando su papel como Rey Demonio que le daría color a esta era, por lo que no tenía la intención de desaparecer gloriosamente. De hecho, estaba bastante convencido de que su deber era sobrevivir, incluso si tenía que ensuciarse de lodo, y prolongar la época turbulenta en la que la santa y los héroes podrían brillar.

Así que viviría, sobreviviría y persistiría, creando una vez más el campo de batalla. Una y otra vez, sin importar cuántas veces fuera necesario.

"¡Ese es el deber que el cielo me ha otorgado! ¡Volveré a bailar en este escenario!"

"...No te lo permitiré"

"¡¿Qué?!"

Se escuchó una voz desde algún lugar. Y al siguiente momento, se oyeron varios sonidos de cortes en el viento. Los seguidores de Krahe fueron atravesados por flechas que llegaron volando de repente, y Krahe también fue alcanzado por una flecha que lo hizo caer de su caballo. El suelo estaba lleno de lodo por la lluvia que había caído sin que nadie se diera cuenta. Mientras Krahe yacía en el suelo, cubierto de barro, levantó la cabeza y vio a un hombre vestido de blanco frente a él. El hombre desenfundó su espada de la cintura y la apuntó al cuello de Krahe.

"No permitiré que tus ilusiones sigan arrastrando a este mundo a la locura"

"P-pero... tengo un deber..."

"Te dije que era una ilusión" (Suu)

Con un solo movimiento de la espada del hombre, la cabeza de Krahe fue cortada. El hombre limpió su espada de la sangre y la guardó en la vaina, momento en el que sus seguidores se acercaron a él. Entre ellos, un hombre grande de negro con una máscara de tigre se dirigió al hombre.

"Creo que... esto es el final. Julius-dono"

Julius asintió y recogió la cabeza de Krahe, entregándosela al hombre de la máscara de tigre.

"Kagetora-dono, por favor, lleva esta cabeza y entréguesela a Su Majestad Souma"

"Entendido. Transmitiré adecuadamente que fue un logro de Julius-dono"

"...Bueno, después de todo, esa es la razón por la que me colocaron aquí"

Antes de que comenzara la batalla, Souma había colocado a Julius en una ubicación que probablemente sería la ruta de escape de Krahe. Y una vez que el resultado de la batalla se decidió, ajustaron el cerco y se coordinaron para que Krahe escapara por allí. Todo esto se hizo con el único propósito de "permitir que Julius derrotara al comandante enemigo". Julius suspiró y sonrió irónicamente.

"Si pienso en el futuro... tal vez hubiera sido más fácil dejar que alguien más lo matara en mi lugar"

"....En verdad lo siento. Entonces, con su permiso"

Julius observó en silencio cómo Kagetora se llevaba la cabeza. El cielo estaba comenzando a iluminarse, ya estaba empezando a amanecer.


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